Con el objetivo de asegurar la inocuidad de los alimentos para el consumo humano, el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo A.C. (CIAD), trabaja en un proyecto de investigación elaborando aceites esenciales con compuestos antibacterianos naturales para desinfectar frutas y verduras, en esta ocasión provenientes de la combinación del té de limón y la cebolla.
El Dr. Fernando Ayala Zavala, investigador de la Coordinación de Alimentos de Origen Vegetal, explicó que actualmente se utilizan diferentes tecnologías para reducir los riesgos al mínimo asegurando que los alimentos estén sanos, y la tendencia es buscar alternativas naturales “y en CIAD estamos trabajando en diferentes fuentes, en este caso se avalúan dos plantas Té de Limón (Cymbopogon citratus) y la cebolla (Allium cepa)”.
En este proyecto hay un acercamiento con dos plantas que son ricas en compuestos antibacterianos, lo que ya se ha demostrado anteriormente, los terpenos del té de limón son compuestos volátiles, mientras que la cebolla tiene compuestos azufrados, ambos muy distintos, pero los dos matan bacterias.
Agregó que la tendencia en el plano natural, es explorar cómo se ayudan estos dos compuestos al ser aplicados en conjunto a frutas y verduras (sinergismo), y para eso se hizo el estudio que duró aproximadamente un año y medio.
“Entre las combinaciones que hicimos, se redujeron las cantidades de estos compuestos en diferentes proporciones y como resultado observamos que son igual de efectivos a menor concentración cuando están combinados y es cuando se dice que hay un sinergismo de esa combinación porque al atacar a las bacterias lo hacen desde diferentes puntos”, dijo.
Lo que se busca precisó, es combinar compuestos naturales para generar una mezcla más potente y esto se probó en frutas y verduras contra diferentes bacterias patógenas (que producen enfermedades), y se vio que si funciona, así como su eficacia individual y cómo al combinarlos daban el mismo resultado a menores dosis.
“Estas emulsiones o mezclas de aceites esenciales las utilizamos para desinfectar los vegetales, para poder eliminar esas bacterias y lo logramos, ahora lo que sigue es hacer pruebas para ver si cambia el sabor y el olor (pruebas sensoriales), y también hacer pruebas de vida de anaquel”, mencionó.
Cabe mencionar que este proyecto se tituló: Sinergismo antibacteriano entre compuestos terpénicos de Cymbopogon citratus y azufrados de Allium cepa”, y fue el proyecto de tesis del estudiante Luis Alberto Ortega Ramírez para obtener su grado de Maestría en Ciencias.