Los mangos son afectados por una enfermedad llamada antracnosis, misma que disminuye la calidad del fruto evitando su comercialización y para combatirla investigadores del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD) y del Instituto de Biotecnología de la UNAM, desarrollaron el primer biofungicida, a base de la bacteria Bacillus subtilis, que evitará el uso de productos químicos para el control de antracnosis que afecta a diversos cultivos agrícolas.
El Dr. Raúl Allende Molar, adscrito al Laboratorio de Fitopatología de la Coordinación Regional del CIAD en Culiacán, explicó que “ algunos mercados exigen que los mangos vayan sin manchas, que es el principal síntoma de esta enfermedad y otros mercados están exigiendo que la producción de los frutos se realice con el menor uso de productos químicos por lo que este biofungicida ayudará a los productores, que ya se están dedicado a la producción sustentable, a reducir los daños causados por esta enfermedad, incrementar la calidad de los frutos y las posibilidades de exportación ”, dijo.
Explicó que el manejo y control de antracnosis es tradicionalmente con uso de productos químicos, sintéticos y que tiene efectos colaterales en la salud humana y el medio ambiente (dejando residuos rechazados para la exportación) y esta nueva alternativa biológica, llamada Fungifree-AB, controla la enfermedad en niveles iguales o superiores a los que se logran usando fungicidas químicos, sólo que propone usar sistemas de producción sustentables y buscar nichos de mercado a los que no se ha podido acceder.
El investigador del CIAD detalló que este biofungicida, se usa para fumigar -una vez al mes- el árbol del mango, lo que permite al productor obtener al final de la temporada mango de muy buena calidad sin residuos químicos, eliminando los problemas para la exportación y para que el biofungicida tenga mejores resultados debe ser aplicado en cinco ocasiones en la temporada de precosecha que va de enero a junio.
El biofungicida, que incluye en su formulación bacterias aisladas de la naturaleza, es inocuo para el ser humano y por ello la Comisión Federal para la Protección de Riesgos Sanitarios (Cofepris) ha otorgado su aval al producto desarrollado por los investigadores para el uso común en las plantas de mango. Se trata del primer producto de su tipo desarrollado en instituciones de investigación mexicanas que llega al mercado.
El proyecto inició hace 12 años en los cuales se pasó de buscar alternativas para controlar la antracnosis trabajando exclusivamente en las instituciones de investigación, a la formación de la empresa Agro&Biotecnia, un spin-off del Instituto de Biotecnología, lo que permitió poner el producto en el mercado a través de la empresa FMC Agroquímica de México, durante la pasada Expo Agro Irapuato (el pasado mes de noviembre).
Es importante destacar que el producto está destinado a combatir la enfermedad antracnosis en mangos , en donde además de los tipos petacones ha sido probado también con mango ‘Ataulfo’ y ‘Manila’, frutos que se consumen en México. Además se ha probado en aguacate y papaya con muy buenos resultados, al grado que ya se tiene el dictamen técnico positivo por parte de Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) y se encuentran en trámite sus registros finales ante Cofepris, pero por el momento, el producto está autorizado sólo para su uso en mango de exportación.
El doctor Allende Molar destacó que México ha sido en los últimos años el principal exportador de mango Kent, Keitt y Tommy Atkins (petacones), en aguacate es el principal país productor y en papaya es uno de los primeros cinco países exportadores, por lo que el uso de este producto podría abrir nuevos mercados.