Desarrollan material para curación de heridas en pacientes diabéticos
Las heridas cutáneas en pacientes con diabetes tipo 2 representan un peligro para estas personas, ya que su curación se obstaculiza debido a la permanencia de un estado proinflamatorio, en donde se impide la producción de factores de crecimiento (factor de crecimiento transformante beta TGF-β), así como a respuestas inmunes (fibroblastos), lo cual ralentiza la cicatrización y, por consiguiente, el peligro de aparición de infecciones bacterianas aumenta considerablemente.
Se calcula que el tratamiento para la curación de heridas cutáneas en pacientes con diabetes mellitus tipo 2 representa un gasto de alrededor de 2.1 trillones de dólares anuales a los sectores de salud del mundo. Este consumo se debe a las complicaciones presentes en su proceso de curación.
Como parte de su formación como doctora en ciencias en el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD), Paola Iveth Campa Siqueiros, bajo la tutela académica del profesor Tomás Jesús Madera Santana, desarrolló un material que funciona como apósito (cubierta para promover la cicatrización) para heridas cutáneas para pacientes diabéticos.
Se trata de un apósito formado por nanofibras coelectrohiladas de quitosano, alcohol polivinílico (PVA), eugenol y gelatina. Estos biopolímeros han reportado efectos antimicrobianos y terapéuticos (quitosano), cicatrizantes (gelatina), antioxidante y antimicrobiano (eugenol) y características mecánicas adecuadas (PVA).
Este trabajo fue realizado en conjunto con varios laboratorios, demostrando su carácter multidisciplinario: Laboratorio de Química de Polímeros de la Universidad de Sonora, Laboratorio de Bioquímica Analítica y Biotecnología Alimentaria del Instituto Tecnológico de Sonora, Laboratorio de Mecánica de Materiales Compuestos del Centro de Investigación Científica de Yucatán, Laboratorio Nacional de Nano y Biomateriales del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional, Laboratorio de Microbiología Molecular Aplicada del Instituto Tecnológico de Mérida y Laboratorio de Tecnologías Emergentes del CIAD. En estos, el material fue sujeto a evaluaciones ópticas, morfológicas, mecánicas, estructurales, térmicas y antimicrobianas, demostrándose su resistencia a bacterias como Staphylococcus aureus, Listeria monocytogenes y Salmonella Typhimurium.
La creación de materiales de curación es un campo en constante innovación a nivel internacional. Sin embargo, la principal contribución de este desarrollo tecnológico del CIAD, que le diferencia del resto, radica en la naturaleza intrínseca del material, pues las nanofibras coelectrohiladas poseen una morfología similar a la matriz extracelular, así como una alta relación área-volumen, promoviendo la liberación de los compuestos activos de manera paulatina. De esta manera, el uso del apósito sería más prolongado y, por lo tanto, la aplicación no sería tan frecuente.
Una siguiente fase necesaria en esta investigación es realizar ensayos in vivo utilizando ratas con diabetes inducida.