Tradicionalmente los mexicanos consumimos las hojas secas del orégano como condimento. No obstante, esta especia también ha sido utilizada como infusión para tratar enfermedades respiratorias, problemas digestivos, cólicos, dolores de cabeza, reumatismo y otros desórdenes relacionados con procesos de inflamación.
Orégano es el nombre común que se utiliza para definir un aroma y sabor característico proveniente de un amplio grupo de géneros y especies vegetales usados como especia. Más de sesenta especies de plantas son conocidas en el mundo con el nombre de orégano; en México existen alrededor de cuarenta, la más comúnmente comercializada es Lippia graveolens, pero Lippia palmeri y Hedeoma patens también son encontradas en el mercado.
Las propiedades benéficas del orégano, como antioxidante y antiinflamatoria, están asociadas a la presencia de aceites esenciales y compuestos fenólicos, como los ácidos fenólicos y los flavonoides.
Dichos atributos cobran especial importancia en una era en la que la humanidad demanda alternativas farmacológicas de origen vegetal, pues existe evidencia de que el uso prolongado de antiinflamatorios comerciales contra padecimientos crónicos puede tener consecuencias dañinas en la salud, como gastritis, úlceras o daño hepático, por lo que el desarrollo de nuevos fármacos con base en el orégano se vuelve de interés.
Sin embargo, para que los compuestos fenólicos presentes en el orégano ejerzan su efecto antiinflamatorio, es necesario que se encuentren biodisponibles, es decir, que pasen por el tracto digestivo y sean posteriormente absorbidos al torrente sanguíneo. Durante este proceso, los compuestos fenólicos pueden ser modificados y sus propiedades bioactivas pueden ser afectadas; sin embargo, estos cambios aún no han sido estudiados.
Un campo lleno de posibilidades
La inflamación es una reacción biológica de defensa provocada por un daño en el organismo, en la que se activan células (macrófagos) que promueven la producción de mediadores involucrados en la respuesta inflamatoria, tales como especies reactivas de oxígeno, óxido nítrico, TNF-α, IL-1β, IL-6, IL-8, entre otros. La sobreproducción de estos mediadores está relacionada en la aparición de enfermedades crónico-degenerativas como artritis, aterosclerosis, asma, etc. Es por ello que la inhibición de la producción de los mediadores inflamatorios es un objetivo importante en el tratamiento de este tipo de padecimientos.
En el Laboratorio de Alimentos Funcionales y Nutracéuticos de la Coordinación Regional Culiacán del CIAD, el grupo de investigación dirigido por el Dr. José Basilio Heredia investiga el mecanismo molecular antiinflamatorio y la bioaccesibilidad de los compuestos fenólicos del orégano mexicano.
Este estudio está financiado por un proyecto de Ciencia Básica del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), y cuenta con la colaboración de la Dra. Nayely Leyva López y del estudiante de doctorado en ciencias Erick Paul Gutiérrez Grijalva.
Colaboración del Dr. José Basilio Heredia, profesor investigador del CIAD.