Hablando de economía en Sonora, en términos cuantitativos se puede decir que se ha avanzado, pero en la parte cualitativa del crecimiento o desarrollo como tal hay un balance negativo porque no hay un marco general de política económica estatal, enfatizó el Dr. Pablo Wong González, al participar en la mesa Sonora en la frontera de la transición, durante el Foro Local y Seminario Internacional “Cambio Institucional y Alternancia: Un balance desde las organizaciones y los actores”, organizado por El Colegio de Sonora en el marco de su 32 aniversario y el Instituto de Capacitación, Competitividad y Relaciones Laborales para el Estado de Sonora (ICCRLES).
Durante su primer participación el director general del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo A.C. (CIAD), agregó que sigue habiendo un énfasis en cuanto a cantidad y no a calidad en la economía, hay una mayor atención a la velocidad del crecimiento y sigue estando pendiente la direccionalidad del crecimiento “se sigue dando mayor peso al concepto de “atractividad” de la economía sonorense, más que al de competitividad”, dijo.
Al hablar específicamente de las principales fortalezas de Sonora, destacó que “en ciencia, tecnología e innovación, nuestro estado está clasificado como uno de los más avanzados junto con Baja California, Nuevo León, Querétaro y Jalisco, lo que quiere decir que se reconocen las capacidades y se aprovechan los programas federales a través de la Secretaría de Economía.
La debilidad mencionó, está en que estas capacidades: recursos humanos, tecnológicos y de infraestructura, todavía no se traducen de manera amplia en procesos de innovación, es decir, no existe una transferencia real de la investigación al aparato productivo “hay que dirigir para poder pasar esas capacidades y establecer agendas estatales de innovación”, manifestó el Dr. Wong.
Señaló que si las cosas siguen como están la economía de Sonora estará basada en un “capitalismo crony”, donde muchos productores basan su permanencia en el mercado a base de subsidios y eso cada vez es menos posible, es decir, se le está acabando la capacidad de “competir” a este grupo.
Finalmente Wong González precisó que se habla de una transición en Sonora de una economía rural-agropecuaria a una urbana-industrial que no se ha dado totalmente y surge la necesidad de transitar a la “Economía del Conocimiento”.