Nitzia Arce Carrillo es una joven investigadora nayarita, nacida en la capital de ese estado; es maestra en ciencias, especialista en tecnología de alimentos, por el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD).
Fue un programa de televisión de ciencia para niños lo que la impulsó para hacer investigación y encaminarse hacia la prolongación de la vida de anaquel de los alimentos.
En entrevista con la Agencia Informativa Conacyt, Arce Carrillo refirió que su acercamiento con la ciencia inició cuando era pequeña y se imaginaba utilizando fórmulas químicas o realizando experimentos, todo gracias a las imágenes de su programa de televisión favorito.
«“Desde que era chica me interesó la ciencia, veía el programa que se llamaba El mundo de Beakman, que pasaba en el Canal 11, y ahí me despertó la inquietud, por eso estudié mi bachillerato en el Cetis 100, en el área de alimentos. Después decidí ingresar a la carrera de químico farmacobiólogo en la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN), donde abrieron la terminal de química en alimentos, y pensaba: “una persona podrá dejar de comprar medicamentos, pero no dejar de comprar de comer”, y eso me llamó la atención para investigar», declaró.
Nitzia Arce realizó sus prácticas profesionales en una empresa local que elabora purés y concentrados de alimentos (Mexifrutas), donde observó la importancia de los envases y su relación con los productos comestibles, por lo que decidió especializarse y optó por ingresar al posgrado en el CIAD en Hermosillo.
“Fui de visita al centro y vi diferentes líneas de investigación; me llamó la atención el área de envases, así que ahí cursé mi posgrado. Me interesan los envases porque es una manera de prolongar la vida de anaquel sin necesariamente adicionar componentes en el alimento, y es mejor pensar en diseñar un envase que pueda hacerlo”, anticipó.
Los envases inteligentes y la realidad virtual
La maestra en alimentos afirmó que, en la actualidad, el rumbo de las investigaciones sobre los contenedores de productos comestibles se enfoca en la interacción y, sobre todo, que utilice las tecnologías de la comunicación como parte de su función.
“Ahora deben decir más de lo que estás viendo o tocando; ahora, por ejemplo, con los teléfonos inteligentes, puedes tener un código QR (por las siglas en inglés de quick response code), tomar una imagen del módulo y obtendrás información sobre las propiedades del producto: si es mejor que otro, si fue manipulado, o saber las condiciones en las que fue manipulado; entonces, así se puede interactuar con el cliente, sin tener en específico un promotor presencial”, puntualizó Arce Carrillo.
Envase y salud
Según la especialista, los empaques que utiliza actualmente la industria de alimentos son seguros para la salud humana, aunque existe incertidumbre alrededor de ellos porque no se ha comunicado con suficiencia los avances científicos y tecnológicos a este respecto.
“Antes las latas no tenían recubrimiento o barnices que evitaran que se corroyeran y se oxidaran, pero todos los envases son seguros; para que un envase pueda estar en contacto con un alimento, Cofepris tiene una lista y lineamientos respecto a materiales que pueden ser utilizados para estos fines”, precisó.
Experiencia y juventud
Para la maestra Nitzia Arce ser joven y ser mujer son las complicaciones más comunes para acceder a espacios de investigación, pero con el paso del tiempo, dijo, esa visión ha ido cambiando y hay mayor oportunidad para el desarrollo de proyectos.
«En algunas situaciones puede ser que existan dificultades en cuanto a que sea joven y sea mujer haciendo ciencia o investigaciones; te ven con desconfianza, y te dicen: “qué tanto sabes, qué experiencia tienes”, pero eso está cambiando, y en realidad, cuando estudié, la mayoría de mis compañeras eran mujeres, así que pienso que también estamos rompiendo las barreras de género», señaló.
Las repercusiones que, aseguró, ha dejado la ciencia en su vida cotidiana han sido las de convertirse en observadora permanente de los alimentos y recipientes que consume; incluso cuando viaja busca que los productos sean los mejores, además de que el empaque contribuya con ello.
“Ya me fijo un poco más en lo que voy a adquirir; por ejemplo, en el súper voy a checar qué cosas nuevas hay o, cuando voy de viaje a otra ciudad, me llaman la atención algunos alimentos y sin querer estoy viendo defectos o buscando mejorarlos”, destacó.
El futuro de los contenedores en Nayarit
Actualmente en Nayarit no hay líneas de investigación dirigidas específicamente al área de envases, al diseño de envases inteligentes e interactivos; sin embargo, previó que por la vocación turística y de aprovechamiento de recursos naturales del estado, en un futuro se puedan realizar proyectos sobre ello.
“Hay que apoyar más la parte científica y a los grupos de investigación que se dedican a esto para poder estar a la vanguardia en los sectores industriales dedicados al procesamiento de alimentos, sobre todo para pensar en el medio ambiente”, indicó.
Respecto a esto último, Arce Carrillo dijo que la tendencia para la fabricación de envases es encontrar alternativas plásticas amigables con el ambiente, minimizar los impactos; se buscan polímeros que sean biodegradables, porque algunos materiales, precisó, van a durar intactos por años.
Uno de los materiales que ha incursionado en la industria, refirió, es el ácido poliláctico, un polímero utilizado en la conserva de alimentos porque tiene orígenes vegetales como el maíz, aunque también tiene un ciclo de vida más corto.
Finalmente, la doctora en alimentos Nitzia Arce Carrillo dijo que ahora no realiza investigación aplicada, aunque se mantiene en el área de gestión de alimentos como asesora de empresarios y organizaciones de productores y campesinos que se encuentran interesados en incorporar tecnología en sus espacios.
“Ahora no estoy haciendo investigación aplicada, estoy en gestión de alimentos, ya que soy asesora de empresarios y organizaciones rurales con respecto de la incorporación de tecnología, y veo que están muy interesados en querer mejorar sus procesos de producción pero desconocen con quién acercarse y lo que requieren”, terminó.
Colaboración de Claudia Karina Gómez Cancino, corresponsal de la Agencia Informativa Conacyt.
Fuente: http://bit.ly/2ghjJvE.