Microbiota intestinal: una solución de peso
En algunas culturas y en ciertas épocas la obesidad en las personas representaba riqueza, abundancia, belleza y buena salud. Actualmente, es considerada uno de los problemas más grandes de salud pública, que tiene resultados fatales a largo plazo y disminución de la calidad de vida. Aunque las afectaciones que causa la obesidad se difunden en los programas de salud, la cifra de personas obesas se incrementa continuamente, asociado a los malos hábitos alimenticios.
En las dietas occidentales, la mayoría de las calorías ingeridas provienen de alimentos abundantes en grasas. Al mantener un consumo elevado de estos alimentos, las grasas son acumuladas y, con el paso del tiempo, hay un incremento de peso, además de otras características relacionadas con la obesidad como alteraciones en el procesamiento de grasas, cambios en la presión sanguínea, procesos de inflamación en tejido adiposo y cambios en la composición de la microbiota intestinal.
Durante el procesamiento de los alimentos, las bacterias que habitan el tracto digestivo (microbiota intestinal) desempeñan un papel fundamental en la absorción de nutrientes y ayudan a contrarrestar algunas enfermedades, entre ellas la obesidad. ¿Cómo pueden regular/interferir/prevenir esta enfermedad?
Estudios realizados en la Universidad de Agricultura y Tecnología en Japón demostraron que ciertos grupos bacterianos, principalmente aquellos que pertenecen al género Lactobacillus, producen una molécula relacionada con el ácido linoleico (HYA), el cual es un ácido graso esencial omega 6. En un experimento realizado en ratones con obesidad inducida por dieta, la suplementación alimenticia con este ácido graso, aunado a la producción por parte de la microbiota intestinal, demostró un efecto importante en el metabolismo: los ratones disminuyeron su apetito, bajaron de peso corporal y sus reservas de grasa, así como los niveles de glucosa y colesterol en sangre. Otro de los hallazgos de este equipo de investigación revela que el HYA promueve efectos antiinflamatorios en el intestino.
Con base en estos resultados, se propone la suplementación con este tipo de ácidos grasos en personas con obesidad como una nueva alternativa personalizada para combatir esta enfermedad, en conjunto con otras estrategias, como el desarrollo de alimentos funcionales utilizando HYA como componente activo. Aunque se han determinado ciertas interacciones entre la microbiota intestinal y el huésped, el mecanismo por el cual las bacterias del tracto digestivo promueven el bienestar del organismo, así como la protección a ciertas enfermedades, aún no se comprende completamente, por lo que se requiere mayor investigación al respecto.
Cita del trabajo
Miyamoto, J., Igarashi, M., Watanabe, K., Karaki, S., Mukouyama, H., Kishino, S., … Kimura, I. (2019). Gut microbiota confers host resistance to obesity by metabolizing dietary polyunsaturated fatty acids. Nature Communications, 10:4007. Doi: 10.1038/s41467-019- 11978- 0.
Colaboración de Beatriz Ibarra Mendoza, estudiante del doctorado en ciencias en la Coordinación Regional Mazatlán del CIAD. Su tema de investigación analiza las alteraciones en la microbiota intestinal de pez cebra por exposición a glifosato y cómo éstas promueven efectos en el organismo.