El Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (A.C. (CIAD), realiza un proyecto de investigación con el que pretende diseñar un “kit” que ayude a los productores de camarón a monitorear la respuesta del camarón ante la baja de oxígeno en el agua, evento que provoca pérdidas millonarias de producto a nivel mundial.
La Dra. Adriana Muhlia Almazán, investigadora de la Coordinación de Tecnología de Alimentos de Origen Animal (CTAOA), y responsable del proyecto, explicó que los eventos de hipoxia se presentan por cambios ambientales: al subir la temperatura y disminuir las concentraciones de oxígeno en el agua, provocando que el camarón blanco Litopenaeus vannamei no sea capaz de respirar causando muertes masivas.
Forma parte de la investigación estudiar la capacidad de respuesta de las enzimas antioxidantes de los organismos para contrarrestar el efecto de la hipoxia en la producción de camarón blanco en el Estado de Sonora; también tiene como finalidad evaluar su efecto en la supervivencia del crustáceo, ya que las enzimas antioxidantes tienen como función clave contrarrestar el daño que causan los radicales libres a la célula cuando baja el oxígeno en los estanques donde se produce camarón, precisó la investigadora.
Describió que al presentarse esta condición de estrés, las enzimas antioxidantes evitan daño celular y permiten que el crecimiento del crustáceo continúe sin dañar sus funciones vitales en las moléculas que forman los bloques básicos que conforman células, tejidos y órganos, es por ello que el proyecto de investigación contempla conocer más de su funcionamiento.
“Expresión y caracterización de genes antioxidantes en condiciones de hipoxia en el camarón blanco Litopenaeus vannamei y su efecto en la supervivencia del mismo”, es el nombre del proyecto de investigación que se desarrollará durante un año de trabajo.
La Dra. Muhlia Almazán, detalló que la inquietud surge a propuesta de la Convocatoria lanzada por Fundación Produce, preocupados por los eventos de hipoxia que se registran cada ciclo productivo en las granjas camaronícolas, provocando mortalidades masivas en los estanques y dejando perdidas millonarias, impactando al sector económico y social en el Estado de Sonora, situación que se busca revertir.
“Queremos desarrollar un instrumento de valoración del estado estable de los organismos en cultivo, a través del diseño de un kit que permita, por medio de la evaluación de cambios en la expresión génica de las principales enzimas antioxidantes, detectar tejidos en estado de hipoxia y así determinar el estado en el que se encuentra un organismo en condiciones de hipoxia y su sobrevivencia”, dijo la investigadora.
Al ser factible la evaluación del estado de los organismos en lo referente a su capacidad de respuesta antioxidante, no solo permitirá conocer y mejorar las condiciones de cultivo en lo que a niveles óptimos de oxígeno disuelto en el agua se refiere, sino también permitirá evaluar en diferentes momentos del ciclo de cultivo la capacidad de respuesta de los organismos frente a un evento de hipoxia inesperado.
Los eventos de hipoxia, abundó pueden presentarse provocados por la ausencia de masas de aire en el ambiente, por incrementos en la temperatura del agua que generan que el oxígeno pierda solubilidad en el agua y en la medida que los eventos hipóxicos afecten en menor grado a los sistemas de cultivo, las pérdidas económicas disminuirán.